martes, 30 de julio de 2019

La Cirugía y el Alcohol



Nadie puede negar que existen beneficios en ingerir bebidas alcohólicas. Son ricas en antioxidantes e inclusive hay estudios sobre sus efectos cardioprotectores. Sin dejar de mencionar que es el mejor lubricante social.

Todos coincidimos que su efecto relajante es efectivo y puede ser que antes de someterte a una cirugía sientas la necesidad de tomarte una copita de vino o cerveza; sin embargo puedes ignorar el peligro que representa en este particular escenario.

Un efecto inevitable de las cirugías es la hinchazón de los tejidos que puede ser muy incómoda ya que distribuye el agua de tu sangre fuera de los vasos sanguíneos causando deshidratación generalizada. Consumir alcohol no ayuda en nada a este proceso. El alcohol tiene efectos muy similares, causa vasodilatación e hinchazón generalizada.

¿Recuerdas esa sensación desagradable al día siguiente que llamamos “cruda” o “resaca”? Deshidratación.

Hay tejidos que permanecen hinchados por mucho tiempo, como la nariz. Si esperas ver un cambio importante y pronto en tu rinoplastía debes considerar alejarte del alcohol por varios meses.

El alcohol “adelgaza” la sangre aumentando el riesgo de hemorragias lo cual puede ser peligroso, generar más moretes y una recuperación larga e incómoda.

Quienes suelen beber, así como consumir cierto tipo de drogas o medicamentos regularmente con el fin de aliviar el estrés o inclusive algún tipo de dolor emocional, suelen recurrir a ello para el dolor físico, pero no funciona igual. Por el contrario, desarrollan resistencia a muchos medicamentos que pueden no funcionar o durar poco.

Debido al tiempo que tardamos en metabolizar el alcohol y sus subproductos, sugerimos evitar su consumo 2 semanas antes de la cirugía, ya que estos subproductos pueden interactuar con los medicamentos anestésicos pudiendo tener efectos desagradables al término de la cirugía como son nauseas, vómitos, dolor de cabeza, malestar general, presión baja, desmayos, pérdida de la coordinación, etc. Situaciones que además de incómodas aumentan el riesgo de sangrado, problemas cardiacos e inclusive respiratorios.      

Si planeas someterte a una cirugía que aumente tu confianza sobre tu cuerpo, ciertamente tener una piel seca y manchada no ayuda en nada. El alcohol bloquea directamente la producción de la hormona que regula la cantidad de orina que producimos. Por cada gramo de alcohol que consumimos, los riñones cuadruplican la producción de orina, causando más deshidratación siendo la piel uno de los primeros en secarse. ¿Te cuento un pequeño secreto? Tomar más agua, no evita este efecto.


Considera esta pequeña dosis de información si eres de los amantes de las bebidas alcohólicas y siempre comenta este tipo de hábitos con tu cirujano desde la primer consulta.

Siempre habrá tiempo para una copa de vino, una cerveza artesanal o un tequila sólo o con los amigos, ahorra ese tiempo para celebrar cuando hayas logrado ese resultado tan anhelado. Y siempre recuerda invitar a tu cirujano, seguro necesita relajarse un poco al final de una semana de trabajo satisfactorio. 

Dr Christian G Ramos

domingo, 28 de julio de 2019

Vaginoplastía




La cirugía de rejuvenecimiento o plastía vaginal ha ganado popularidad recientemente, no sólo gracias al cambio de mentalidad general hacia el cuidado y apreciación de los genitales, hasta hace pocos un tema poco abordado por las mujeres, sino también por la apertura de algunas figuras públicas sometidas a este procedimiento y que han hablado abiertamente sobre él. Sin embargo, aún no es muy claro en qué consiste el rejuvenecimiento vaginal y cuáles son los beneficios que ésta puede dar.
El Rejuvenecimiento Vaginal incluye dos procedimientos muy específicos: Vaginoplastía y Labioplastía, un procedimiento cosmético externo comúnmente referido como “Lifting Vaginal”. La Labioplastía modifica la forma de los labios largos o prominentes, situación que puede causar inseguridad e inclusive incomodidad física.
La Vaginoplastía, en cambio, es una cirugía reconstructiva encaminada a devolver la tensión de las paredes vaginales que se pueden volver laxas debido a partos, a la edad o algunas enfermedades. Al debilitarse los tejidos del canal vaginal las relaciones sexuales pueden ser poco placenteras, incómodas y dolorosas. Actividades rutinarias como colocarse un tampón o copa vaginal puede ser complicado y aparecer las vergonzosas flatulencias vaginales.  En este procedimiento el cirujano retira el exceso de tejido y repara reacomodando las paredes. El resultado es un canal vaginal más recto y estrecho permitiendo a las mujeres retomar su vida normal e inclusive mejorar su vida sexual. Inclusive hay pacientes que refieren que es como tener sexo por primera vez, nuevamente.
Aunque el procedimiento no tiene como objetivo devolver la virginidad a la mujer, puede hacer que tanto la paciente como su pareja sientan que así es. El reajuste y la tensión de los músculos y tejidos del introito vaginal puede aumentar la sensación de la mujer durante el coito haciendo de esta una mejor experiencia para ella y su pareja.
Es probable que exista entumecimiento después del procedimiento pero este desaparecerá poco a poco en las primeras semanas. Hay pacientes que pueden experimentar daño muscular severo y otros efectos secundarios serios, esto se puede evitar fácilmente acudiendo con cirujanos especialistas certificados y con entrenamiento en rejuvenecimiento vaginal.

Dr Christian G Ramos Acevedo
drchrisramos@gmail.com